El volcán Kilauea, reconocido como uno de los más activos y jóvenes de Hawái, ha vuelto a la actividad este lunes por la mañana, dejando a la comunidad y a los especialistas en alerta tras la impresionante emisión de fuentes de lava que alcanzaron hasta 80 metros de altura. La erupción, localizada en el cráter Halema’uma’u, activó el nivel de alerta naranja en la región.

El evento comenzó a las 02:20 horas, según el Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS, por sus siglas en inglés). En un comunicado, el organismo detalló que las fuentes de lava emergieron de manera rápida y espectacular, aunque la actividad volcánica se ha mantenido contenida en la cumbre. Hasta el momento, no se han detectado cambios significativos en las zonas de grietas cercanas.

Now that the live chat with HVO Scientist-in-Charge Ken Hon has ended, you can find the streaming feed of the Kīlauea eruption at https://t.co/Fj6KF39Ayz. pic.twitter.com/Ykh8LdhMz1

— USGS Volcanoes🌋 (@USGSVolcanoes) December 23, 2024

Las autoridades confirmaron que no hay amenazas inmediatas a la infraestructura. Sin embargo, el principal riesgo identificado son los altos niveles de gas volcánico liberados durante la erupción. Este gas puede afectar amplias áreas dependiendo de la dirección del viento, que generalmente sopla hacia el suroeste de Hawái. Según las mediciones actuales, la columna de gases y partículas volcánicas finas alcanza alturas de entre 600 y 1,200 metros, lo que podría impactar la calidad del aire en las comunidades circundantes.

En 2018, este volcán protagonizó una de sus erupciones más devastadoras, destruyendo alrededor de 700 viviendas en un periodo de cuatro meses y desplazando a miles de residentes. Aunque la situación actual no se asemeja a ese episodio, los expertos y las autoridades permanecen vigilantes ante cualquier cambio.

Los visitantes del parque y las comunidades locales han sido advertidos sobre los riesgos de exposición a gases tóxicos, instándolos a seguir las recomendaciones de las autoridades y evitar áreas restringidas. Mientras tanto, el USGS continúa supervisando de cerca la actividad sísmica y volcánica para brindar actualizaciones en tiempo real.