El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, celebró la reciente declaración del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, quien anunció que designará a los cárteles del narcotráfico como organizaciones terroristas extranjeras al asumir el poder en enero. Esta medida marca un cambio significativo en la estrategia estadounidense frente al narcotráfico.

“Me alegra que el presidente electo Trump reconozca a los cárteles como grupos terroristas. Es un paso que Estados Unidos nunca había dado y que en Ecuador adoptamos a inicios de este año,” declaró Noboa, quien destacó su compromiso por combatir el crimen organizado en su país. En enero pasado, Ecuador declaró un “conflicto armado interno” contra 22 organizaciones criminales vinculadas al narcotráfico, etiquetándolas como grupos terroristas.

Durante un foro en Phoenix, Arizona, organizado por Turning Point USA, Trump reafirmó su intención de expulsar a pandillas extranjeras y desmantelar las redes criminales que operan en suelo estadounidense. “Designaré inmediatamente a los cárteles como organizaciones terroristas extranjeras. Lo haré de inmediato,” enfatizó el republicano, quien también prometió deportar y destruir las operaciones de narcotrafico en Estados Unidos.

En una entrevista con Radio Democracia, Noboa subrayó la necesidad de un enfoque coordinado para enfrentar el narcoterrorismo. “El crimen trasnacional necesita una respuesta trasnacional. Hemos dialogado con Estados Unidos, la Unión Europea, Japón, Corea y países sudamericanos como Brasil y Argentina para consolidar un esfuerzo conjunto,” explicó. Además, destacó el fortalecimiento de las fronteras y las mejoras en la situación fiscal del país como factores clave para acelerar la lucha contra la inseguridad.

Noboa también abordó los desafíos que enfrenta Ecuador en sus sistemas penitenciarios. Con más de 4,000 reclusos en condiciones de hacinamiento, el presidente enfatizó la urgencia de construir nuevas prisiones y mejorar las condiciones actuales. “Es crucial aislar a los criminales más peligrosos y reestructurar un sistema carcelario que heredamos destruido. Hoy, la violencia en las cárceles ha disminuido en comparación con los dos últimos gobiernos,” aseguró.

Entre 2021 y 2023, más de 500 reclusos fueron asesinados en violentas masacres dentro de las prisiones, a menudo vinculadas a disputas entre bandas rivales. Aunque el gobierno militarizó las cárceles y tomó medidas en el marco del “conflicto armado interno”, Noboa reconoció que la lucha continúa. “Seguimos enfrentándonos a más de 35,000 narcoterroristas armados que atacan a la nación.”

Con miras a su posible reelección en febrero próximo, Noboa reafirmó su compromiso con la seguridad y estabilidad del país. Destacó avances en la militarización de puertos y la lucha contra actividades ilegales como la minería, medidas que buscan debilitar las fuentes de financiamiento del crimen organizado.