A inicios del mes de marzo trascendió la noticia de cuatro estadounidenses que fueron secuestrados de manera violenta, por parte de una cédula del crimen organizado en la ciudad de Matamoros Tamaulipas. Dos de ellos fueron encontrados con vida, mientras que los otros perdieron la vida, además de una ciudadana mexicana que fue víctima durante el tiroteo por una bala perdida.

Por parte del doctor José Andrés Sumano Rodríguez, quién es investigador del departamento de estudios culturales del colegio de la frontera norte, señaló que este hecho se inscribe dentro de las disputas de los grupos criminales en la región y que afectan no solo a ciudadanos extranjeros, sino también a residentes por igual.

El especialista señaló que este lamentable hecho, donde tres personas perdieron la vida, está siendo utilizado como un discurso político, por parte de algunos actores gubernamentales de Estados Unidos, para impulsar sus campañas electorales.

Por último, enfatizó que si bien este suceso, en donde aparentemente hubo una confusión por parte de los secuestradores, culminó con el retorno de dos personas con vida y los cuerpos de los fallecidos, no es el común en la región de México, ya que las instituciones se encuentran rebasadas o en ciertos casos coludidas con el crimen organizado, lo que deja a muchas familias en la incertidumbre.