Fueron retirados por autoridades de los tres órdenes de gobierno los vehículos baleados y calcinados abandonados durante el enfrentamiento entre presuntos gatilleros y elementos del Ejército Mexicano el “Jueves Negro” en la captura de Ovidio Guzmán López sobre la carretera hacia la sindicatura de Jesús María, al norte de Culiacán.

Alrededor de 20 vehículos fueron retirados, destacando algunos blindados y con aditamentos para empotrar rifles barret calibre 50, así como un camión blindado de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).

Policías de Tránsito y agentes de la Policía Estatal Preventiva (PEP), de la Guardia Nacional y militares, se encargaron de resguardar a choferes de grúas para retirar camionetas de la carretera México 15 hacia dicha sindicatura.

En la entrada del mismo pueblo sindicatura de Villa Adolfo López Mateos, El Tamarindo, estaban calcinados otros vehículos, y otros que se encontraban en el crucero de la comunidad de La Campana también fueron trasladaos en grúas.

Los vehículos quedaron como evidencia del ataque entre presuntos sicarios contra elementos de las Fuerzas Armadas el pasado 5 de enero, llamado “Jueves Negro”, en la sindicatura de Jesús María, donde se registró la recaptura de Ovidio Guzmán López, quien fue trasladado luego de su captura, en una aeronave hacia la Ciudad de México.