Después de cuatro años de espera, el próximo domingo arrancará el Mundial de Fútbol de Qatar 2022. Probablemente esta Copa del Mundo es la más experimental de la historia del torneo.

Esto debido a que es la primera vez que el torneo se llevará a cabo en un país tan pequeño y de Medio Oriente. Sin embargo, el Mundial de Qatar ha generado bastante polémica desde el 2010, cuando la FIFA anunció que sería la sede del campeonato mundial. ¿Por qué?

Para empezar, por la situación de los derechos humanos en este país. Recordemos que en Qatar las mujeres siguen subordinadas a un sistema de tutela masculina. Por si fuera poco, Qatar es uno de los 70 países en el mundo que criminaliza a la comunidad LGBT+.

De hecho, recientemente Khalid Salman, embajador del Mundial de Qatar, aseguró que la homosexualidad es un “daño a la mente”. 

A todo esto se suma la situación de las y los migrantes. Y es que miles de personas llegaron a trabajar a este país debido a la demanda de mano de obra para los preparativos del Mundial.

Sin embargo, en este país se han enfrentado a abusos y explotación laboral. 

Hasta 6.500 trabajadores han muerto, de acuerdo con una investigación de The Guardian, en la construcción de los estadios y demás infraestructura necesaria para la competición, que es el mayor proyecto de apertura internacional del país que controla la tercera reserva de gas del mundo.