Las autoridades rusas han desplegado a más de 260 efectivos de los servicios de emergencia para limpiar el litoral del mar Negro, gravemente afectado por un derrame de petróleo tras el naufragio de dos barcos con hidrocarburos.

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"En la región de Krasnodar, los rescatistas del Ministerio de Emergencias palían las consecuencias del vertido de productos petrolíferos. Los especialistas limpian el litoral del mar Negro desde la localidad de Volna hasta Anapa", informó el ministerio en un comunicado citado por RIA Nóvosti.

En las labores participan más de 260 especialistas, apoyados por medio centenar de máquinas. Según fuentes del ministerio citadas por Interfax, hasta ahora se han retirado más de 12 toneladas de productos petrolíferos y limpiado 4,2 kilómetros de los 35 kilómetros de costa afectados.

Dos petroleros rusos naufragan y vierten toneladas de crudo en el mar Negro. pic.twitter.com/BxDBl3x4Ug

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Los servicios de rescate marítimo instalarán barreras flotantes de contención de entre 150 y 200 metros en la salida del estrecho de Kerch, donde ocurrió el siniestro, para evitar que la mancha de crudo se expanda.

El gobernador de Krasnodar, Veniamín Kondrátiev, aseguró a la televisión pública rusa que la situación está bajo control. Aunque actualmente la limpieza se realiza manualmente, se espera la llegada de equipamiento especializado de la compañía Transneft, que acelerará las labores.

Ante la gravedad del derrame, las autoridades de Anapa, un popular destino turístico, decretaron el estado de emergencia, medida que también se implementó en Vesélovka, en la península de Tamán.

Rescatistas rusos limpian vertido de petróleo en las costas del mar Negro pic.twitter.com/dU0zoyKUCe

— Sepa Más (@Sepa_mass) December 17, 2024

Vecinos de las zonas afectadas informaron haber encontrado pájaros y perros cubiertos de crudo, incapaces de volar o moverse, lo que resalta las consecuencias medioambientales del derrame.

El incidente ocurrió el domingo pasado durante una tormenta en el estrecho de Kerch, que conecta el mar Negro con el de Azov. Los petroleros Volgoneft 212 y Volgoneft 239, construidos hace más de 50 años para navegación fluvial y adaptados posteriormente para el mar, resultaron gravemente dañados. El primero se partió en dos a unos 7-8 kilómetros de la costa, mientras que el segundo encalló a solo 80 metros de la orilla en Krasnodar.