La República Democrática del Congo (RDC) se encuentra en alerta máxima debido a una enfermedad de origen desconocido que ha afectado a 382 personas y causado al menos 71 muertes, según confirmó el ministro de Salud, Samuel Roger Kamba Mulamba. La enfermedad, reportada en la remota región de Panzi, en la provincia de Kwango, presenta síntomas similares a los de una gripe: fiebre, dolores de cabeza, tos, secreción nasal, dificultad respiratoria y anemia.

El 40 % de los casos confirmados corresponde a niños menores de cinco años, un grupo especialmente vulnerable debido a las altas tasas de malnutrición y falta de acceso a servicios de salud en la región.

La República Democrática del Congo enfrenta una crisis sanitaria por una enfermedad desconocida que ha causado decenas de muertes, principalmente en niños mayores de 15 años. pic.twitter.com/etk1uLdx4A

— NotiGlobal360 (@NGlobal360) December 5, 2024

También te puede interesar: Advierten sobre la proximidad de una tercera era nuclear: Reino Unido

Aunque las autoridades descartaron que se trate de COVID-19 debido a la tasa de mortalidad del 7.5-8 %, el diagnóstico aún no está claro. Se sospecha de una enfermedad respiratoria, aunque no se ha determinado si es de origen bacteriano o viral. Muestras recogidas en Panzi han sido enviadas a laboratorios distantes debido a la falta de infraestructura en la zona afectada.

Un equipo de especialistas, incluyendo epidemiólogos, trabaja en la cartografía de los síntomas para caracterizar mejor la enfermedad. Las autoridades también han implementado medidas preventivas, como limitar los movimientos en la zona y promover prácticas de higiene básicas entre la población.

𝐌𝐀𝐒 𝐃𝐎𝐋𝐎𝐑...😢

Al menos 143 personas muertas en Kwango, región suroccidental de República Democrática del Congo, por el brote de una enfermedad desconocida, de la que se han contabilizado por el momento 376 personas infectadas, según el Ministerio de Salud Pública pic.twitter.com/P0VOuFEa0E

— 🏴JosebⒶ MirenⒶ🏴 (@CasviFactory) December 5, 2024

La Organización Mundial de la Salud (OMS) y los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de África (CDC África) han desplegado equipos en el área para colaborar con las autoridades congoleñas. Sin embargo, John Kaseya, director de CDC África, destacó la necesidad de fortalecer los sistemas de vigilancia epidemiológica en RDC para evitar demoras en la detección de brotes.

La provincia de Kwango enfrenta múltiples desafíos sanitarios, incluyendo brotes de sarampión, fiebre tifoidea y gripe estacional, exacerbados por la malnutrición y la precariedad de servicios básicos. Además, RDC continúa lidiando con la viruela símica (mpox), que ha causado más de 1,000 muertes desde que se declaró emergencia internacional en agosto pasado.

Las autoridades mantienen una vigilancia estricta, mientras esperan los resultados de laboratorio para determinar los pasos a seguir ante esta crisis de salud pública.