La adaptación cinematográfica de la novela de Colleen Hoover, “It Ends with Us”, tuvo un buen rendimiento en taquilla en su segundo fin de semana, pero recibió críticas por su tratamiento de la violencia doméstica, un tema central en la trama.

Desde su estreno el 9 de agosto, la película ha sido controversial, especialmente debido a las tensiones entre Blake Lively y el director Justin Baldoni, y a la forma en que la campaña promocional abordó la violencia doméstica.

La trama sigue a Lily Bloom (Lively), quien, tras una infancia de abuso, intenta reconstruir su vida, pero su relación con Ryle Kincaid (Baldoni) revive traumas del pasado y muestra un ciclo de violencia.

La promoción de la película fue criticada por mensajes considerados insensibles, como "Rompemos el patrón o el patrón nos rompe", y una publicación en Instagram el día del estreno que provocó una fuerte reacción.

La promoción de la línea de cócteles de Lively, Betty, durante la gira promocional fue vista como inapropiada debido al contenido de la película, lo que intensificó la controversia.

Durante el estreno en Nueva York, Lively reflexionó sobre la violencia doméstica, destacando que las sobrevivientes son más que su experiencia de abuso y que deben definirse por sí mismas.

A lo largo de la semana, Lively intentó redirigir la conversación compartiendo información sobre la violencia doméstica, pero sus comentarios en Chicago fueron vistos como frívolos y fuera de lugar.

Sony Pictures defendió la promoción de la película, afirmando que muchas mujeres trabajaron arduamente para tratar el tema con cuidado, aunque la respuesta del público sigue dividida y el debate sobre la representación de la violencia doméstica en los medios continúa.

Con información de CNN.