Durante la mañanera de este viernes 16 de agosto, el presiente Andrés Manuel López Obrador reconoció los avances de la Fiscalía General (FGR) con respecto a la investigación del asesinato de Héctor Melesio Cuén Ojeda, ex director de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS). El mandatario mencionó que fue acertada la decisión de la FGR de atraer el caso, originalmente en manos de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Sinaloa, debido a inconsistencias en la versión inicial de los hechos.

AMLO señaló que desde el inicio se han identificado contradicciones, como la versión inicial que indicaba que Cuén Ojeda fue ejecutado en una gasolinera tras resistirse, en contraste con la declaración del narcotraficante Ismael “El Mayo” Zambada, quien aseguró que el asesinato ocurrió en otro lugar. El presidente hizo un llamado a que la FGR continúe con una investigación a fondo y seria, informando al público con total transparencia.

El presidente también se refirió a las irregularidades detectadas en la investigación conducida por la FGE de Sinaloa, bajo la dirección de Sara Bruna Quiñonez Estrada, quien fue designada por el gobernador Rubén Rocha Moya. Aunque Rocha Moya ha declarado que no estaba al tanto de la situación, López Obrador insistió en que es necesario esperar a que se recopile toda la información para aclarar los hechos.

Entre las irregularidades señaladas por la FGR tras recibir la carpeta de investigación de Sinaloa, se encuentran errores en la necropsia, omisión de disparos en el video del ataque, y la falta de procesamiento adecuado de la escena del crimen y del vehículo involucrado. También se destacó que no se cumplieron las medidas de preservación del cuerpo, lo que permitió su incineración, contraviniendo las prácticas criminalísticas.

La muerte de Cuén Ojeda, ocurrida el 25 de julio, coincidió con la detención de Joaquín Guzmán López y “El Mayo” Zambada en El Paso, Texas. Según la versión de Zambada, Cuén Ojeda fue asesinado en el mismo lugar donde fue secuestrado para ser llevado a Estados Unidos.