Simone Biles, la gimnasta estadounidense conocida por desafiar los límites del deporte, hizo un regreso espectacular a los Juegos Olímpicos de París 2024, sorprendiendo a todos con su actuación en las preliminares. Tras una pausa de tres años desde Tokio 2020, donde priorizó su salud mental, se presentó con una rutina que la posiciona como una firme candidata al oro.

En una demostración de habilidad sin igual, ejecutó un "triple flip", un movimiento inédito en la gimnasia femenina, que dejó al público de pie en la Arena de Bercy. Su actuación incluyó la barra de equilibrio, el suelo, el salto y las barras asimétricas, consolidando su dominio absoluto en el deporte. A pesar de una visible venda en su tobillo izquierdo, Biles realizó una rutina sobresaliente, terminando la jornada con una clasificación destacada en tres de los cuatro aparatos.

La gimnasta de Ohio, quien es la más condecorada en la historia de la gimnasia estadounidense, enfrentó preocupaciones iniciales debido a un posible problema en la pantorrilla, que se agravó durante su rutina de suelo. No obstante, Biles se recuperó y completó un histórico Yarachunko doble pica en el salto, convirtiéndose en la primera mujer en ejecutar este movimiento en una competición olímpica.

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— Manu Fresno (@Maanuf96) July 28, 2024

Encabezó la tabla de clasificación individual con una puntuación total de 59.566, liderando a su compañera de equipo y campeona defensora del all-around en Tokio 2020, Sunisa Lee. Su desempeño en los elementos de salto y suelo recibió puntuaciones destacadas, con 15.300 y 14.600, respectivamente, mientras que, en la barra y las barras asimétricas, obtuvo 14.733 y 14.433.

A pesar de su dolor, mostró una fortaleza impresionante, logrando asegurar su lugar en cinco de las seis finales de gimnasia. La única prueba en la que no se clasificó para la final fue en las barras asimétricas. Su actuación ha demostrado que, aunque el dolor sea evidente, no es un obstáculo para una atleta de su calibre.

Simone Biles no solo ha regresado a la competencia, sino que ha reafirmado su estatus como la mejor gimnasta de todos los tiempos. Su habilidad, elegancia y poder han capturado la atención del mundo, y su regreso a la escena olímpica promete ser una celebración de su legado y una consagración definitiva en la historia de la gimnasia.