El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, informó este domingo sobre el desarrollo de intensos combates en la región de Járkov, donde miles de personas han sido desplazadas como resultado de una ofensiva rusa en curso. Zelenski destacó que las batallas defensivas y los encarnizados combates continúan a lo largo de gran parte de la frontera, señalando que algunas aldeas han pasado de ser áreas de transición a zonas de combate activo.

El gobernador de la región de Járkov, Oleg Sinegubov, también compartió en redes sociales la difícil situación en la frontera norte, indicando que la región está bajo fuego enemigo casi las 24 horas del día y que el número de localidades con hostilidades activas ha aumentado.

A pesar de los intentos de las fuerzas ucranianas por mantener las líneas de defensa, el comandante en jefe Oleksandr Syrsky reconoció que la situación se ha deteriorado significativamente y que el enemigo ha logrado éxitos parciales. Sin embargo, aseguró que las fuerzas ucranianas están haciendo todo lo posible para mantener sus posiciones y causar daño al enemigo.

Esta escalada de violencia se produce en un contexto de advertencias previas por parte de las autoridades de Kiev sobre posibles ataques en las regiones fronterizas del noreste, mientras Ucrania espera la llegada de ayuda occidental y enfrenta una escasez de personal militar.

Por otro lado, Rusia ha reivindicado la toma de control de varias localidades en la región de Járkov, aunque esto aún no ha sido confirmado de manera independiente. Los combates en esta región continúan, con consecuencias devastadoras para la población civil y un panorama incierto sobre el desenlace de esta crisis.