El fenómeno de la política en la era digital está cada vez más presente en nuestro entorno actual. Y aunque muchos puedan no sentir afinidad hacia algún personaje político en particular, es imposible ignorar el impacto viral que una campaña digital bien ejecutada puede tener en la percepción pública.

Un ejemplo notable de esto es la campaña digital liderada por el equipo de Alvarez Maynez

Aunque la persuasión política puede no ser el factor determinante detrás de la popularidad del ya viejo Movimiento Ciudadano,-fundado en 1999 como Convergencia- hoy su estrategia de marketing digital es indiscutiblemente brillante usando lo nuevo.

El éxito no radica en la profundidad de las propuestas políticas o en la férrea adherencia a una ideología específica. Más bien, es la capacidad de generar contenido que resuene con la audiencia de una manera simple, pegajosa y, sobre todo, divertida.

El meme de la rola es un ejemplo perfecto de esto: Su simplicidad y su capacidad para quedarse en la mente de la gente es admirable. Pero no se detienen ahí. El equipo detrás de Álvarez Maynez ha sabido aprovechar plataformas como TikTok para llegar aún más lejos. El filtro que permite a la gente «enmascararse» digitalmente como Máynez mientras baila al ritmo de la canción es un golpe maestro. No, no se trata de propuestas políticas o de discusiones ideológicas; se trata de subirse al tren del mame y aprovechar al máximo la viralidad y la energía de las redes sociales.

En un panorama político donde las propuestas pueden perderse entre las luchas de poder y las discusiones ideológicas, la capacidad de conectarse con la gente a un nivel más básico y humano es invaluable. «Maynez» y su equipo han demostrado que entender y abrazar la cultura del Internet puede ser tan importante como cualquier otro aspecto de una campaña política.

Al parecer, «la nueva política», no se trata solo de propuestas y debates. También se trata de conectar con la gente, de entender lo que les importa y de saber cómo llegar a ellos, aunque todo les importe muy poco. Y en ese sentido, la campaña digital de «Maynez» ha demostrado ser un modelo a seguir para políticos de todas las tendencias. Y no es el primero, Obama lo hizo en su momento, usando la campaña digital con lo que había a mano en ese momento.