Los miembros de la Asociación de Comerciantes del Centro Histórico de Tijuana expresaron su inconformidad y preocupación ante la reciente ola de homicidios, hallazgo de cuerpos y el incremento de vendedores ambulantes en la zona. Argumentaron que en las últimas semanas se han registrado hasta siete asesinatos, una situación que aseguraron no se había observado previamente, atribuyéndola principalmente a la insuficiente vigilancia en el área.

“Estamos preocupados por los siete asesinatos en las últimas semanas, una cosa que no se había visto con anterioridad, hablamos con la policía, pero hasta el momento no se ha hecho nada”, señaló Guillermo Díaz presidente de la Asociación.

También señalaron que hasta el momento no existen estadísticas oficiales sobre el cobro de extorsiones, pero tienen constancia de varios propietarios de comercios en la zona que se acercan a la asociación para expresar su preocupación por visitas inesperadas de extorsionadores. El Sr. Díaz afirmó que muchos de estos propietarios optan por no denunciar por miedo a represalias o al cierre de sus negocios.

“No tenemos una estadística, ni conteo, es un secreto a voces que estamos en un estado fallido, no hay censo porque la gente se asusta, porque cierra su negocio y se va. Es una realidad y secreto a voces”, enfatizó Rafael Durán, representante legal de Joyerías Durán. 

En días pasados el fiscal regional de Tijuana de la FGE, Rubén Alfredo Maximiliano Ramos Jiménez, señaló que hasta el momento solo habían detectado tres casos de cobro de piso y que uno de ellos se había perpetuado en la zona centro donde hubo un detenido. 

Por otro lado, se señaló que las cuotas de ambulantaje han aumentado a $1,500.00, lo que en ocasiones resulta perjudicial para los vendedores ciudadanos. No obstante, se ha observado un incremento en la presencia de vendedores ambulantes en las calles tercera, segunda y primera, quienes colocan mantas y exhiben varios artefactos. Según indicaron, estas ventas no constituyen la principal fuente de ingresos para los vendedores, sino que hay otra causa subyacente que las autoridades parecen ignorar.

“Nosotros tenemos en el centro histórico de Tijuana sabemos que prohíbe el reglamento municipal que haya vendedores ambulantes en la calle primera a la calle quinta y en esas cuadras está inundado de vendedores ¿cuál es la explicación? Legalmente ellos no pueden estar ahí y no tienen ningún recibo como nosotros que tenemos que comprobar de uso de suelo y uso de operaciones”, aseveró Durán. 

En ese sentido, señalaron que produjeron de manera independiente volantes para distribuirlos en los comercios y establecimientos del Centro, con detalles sobre el Botón Morado y las aplicaciones de seguridad proporcionadas por las autoridades en los últimos meses. No obstante, instaron a que las autoridades pertinentes realicen las acciones correspondientes en la zona.