En localidad de Aracruz, Espíritu Santo, en Brasil, un hombre de 46 años, identificado como Magno Sergio Gomes, perdió la vida después de consumir un pez globo que él mismo había preparado. 

Los hechos ocurrieron cuando Magno y un amigo decidieron preparar el pez globo, a pesar de no tener experiencia previa con este tipo de animal. Extraoficialmente se comentó que el animal había llegado a manos del hombre, por medio de un amigo cuya identidad no ha sido identificada. Los hombres procedieron a despojarlo de su hígado, el cual alberga la peligrosa tetrodotoxina, uno de los venenos naturales más letales conocidos.

Tras hervir y servir el pez con jugo de limón, los síntomas de envenenamiento no tardaron en manifestarse. Magno y su compañero comenzaron a experimentar entumecimiento en la boca, posterior a esto, se dirigieron de inmediato al hospital, donde la condición de Magno se deterioró rápidamente. A pesar de los esfuerzos médicos, Magno falleció después de 35 días de lucha, mientras que su amigo sobrevivió con secuelas en ambas piernas.

El veneno de tetrodotoxina, presente en el pez globo, actúa de manera rápida y mortal, interfiriendo con la transmisión de señales nerviosas a los músculos y provocando parálisis, lo que puede desencadenar un paro cardíaco y eventualmente la muerte.