A pesar de que el secretario de Economía del Estado, Kurt Honold, anunció la noticia el 15 de diciembre, asegurando que en 10 días se tomaría la decisión por parte del Director General de Aduanas, la alcaldesa de Tijuana, Montserrat Caballero, reaccionó argumentando que no estaba informada de la situación. Manifestó el 19 de diciembre:“lo que no saben es que las calles son del municipio, entonces es algo que yo tengo que decidir, algo que tengo que analizar y el respeto se empieza hablando conmigo antes que cualquier otra institución”.

Ante esta situación la gobernadora del estado, Marina del Pilar, señaló que aún se está trabajando en buscar las opciones viables, por lo cual existe una comunicación con las autoridades de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP por sus siglas en inglés), con el fin de agilizar los cruces que desembocan en la ciudad de Tijuana. Asimismo indicó que durante estas fechas el regreso de connacionales aumenta, así como también el aumento de automóviles en la región hace que incremente aún más el tráfico.

“Hicimos recorrido con la gente de aduanas y se mencionó la oportunidad de utilizar la vialidad paralela a la reja que está ahí, ya que se está utilizando por aduanas para resguardar vehículos incautados, por lo que pidieron al estado y ayuntamiento un recinto con ciertas características para remover esas unidades y posterior a eso coordinador trabajos con ellos en un proyecto tecnológico y una posible implementación futura”, indicó Jorge Alberto Gutiérrez Topete, director del Instituto de Movilidad Sustentable (IMOS).

Por su parte, Alfredo Álvarez Cárdenas, Secretario de Gobierno del Estado, puntualizó en la importancia de buscar un recinto para la reubicación de hasta 500 vehículos decomisados por las autoridades fiscales y preparar las condiciones para que “pueda funcionar como una venida corriente, por si hay un flujo constantes”, finalizó.