Este domingo miles de personas se congregaron en el centro de Belgrado, capital de Serbia, en una protesta para exigir la anulación de las elecciones parlamentarias y locales celebradas hace una semana, que tanto observadores internacionales como civiles serbios consideran injustas.

El Partido Progresista Serbio (SNS, por sus siglas en serbio), partido populista que se encuentra en el poder, obtuvo el 46,72% de los votos en las elecciones parlamentarias celebradas el pasado fin de semana, esto según los resultados preliminares de la comisión electoral del estado.

Debido a la parcialidad de los medios de comunicación, la influencia indebida del Presidente Aleksandar Vucic e irregularidades en la votación, tales como la compra de votos, una misión internacional de observación declaró el lunes que el SNS obtuvo una ventaja injusta en las elecciones.

El presidente Vucic afirmó que las elecciones habían sido limpias.

Según declaraciones de un testigo anónimo para Reuters, la policía disparó gas pimienta contra los protestantes este domingo, después de que una multitud intentara irrumpir en el Ayuntamiento de Belgrado, donde tiene su sede la comisión electoral local.

Los manifestantes intentaron entrar por distintos medios, desde escalar las paredes hasta arrojar rocas contra las ventanas para romperlas. 

La alianza opositora, con orientación política de centro-izquierda, Serbia Contra la Violencia quedó segunda en las elecciones, con el 23,56% de los votos, y el Partido Socialista de Serbia, tercero, con el 6,56%.

Srdjan Milivojevic y Vladimir Obradovic, miembros de la coalición Serbia Contra la Violencia, intentaron abrir la puerta del ayuntamiento pero no lograron entrar. Mientras lo hacían, la multitud gritaba "entra, entra" y "no te rindas", en apoyo a los políticos de la oposición. 

En torno a las 10 de la noche en horario local la policía antidisturbios apartó a los manifestantes del ayuntamiento.

Ante esto el presidente Vucic declaró en un discurso dado durante la tarde que "Reaccionando con calma intentamos no herir a los manifestantes".

Con información de Reuters.