La gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda sigue disfrutando los ecos que dejó su segundo informe de gobierno y la presencia de Andrés Manuel López Obrador.

Sin duda, el fin de semana que pasó dejó muchos mensajes en la política regional y nacional.

El Presidente dedicó una gira de tres días para estar en Baja California, y además se tomó el tiempo de estar en el informe de la Gobernadora, escuchar su discurso y además él mismo dar un mensaje.

Y no fue cualquier mensaje, el Presidente dio un decálogo de acciones en beneficio de este estado, pero además se desvivió en halagos para la Gobernadora, incluso dijo que fue lo mejor que le pudo haber pasado a Baja California.

Sin duda, con esto buscaron poner en su lugar a Jaime Bonilla y dar el mensaje político de que quien tiene el verdadero apoyo de Amlo es Marina del Pilar.

Aún así, en sus llamadas jornadas por la paz, el ex gobernador siguió haciendo berrinche.

También el mensaje fue claro, pues al referirse a la Alcaldesa de Tijuana, que ahí se encontraba, el elogio que le hizo fue que era de Oaxaca.

Pero el informe de la Gobernadora en sí, además de tener la presencia del mandamás nacional, logró que fueran personajes destacados a nivel nacional y local.

Llamó la atención la presencia de Jorge Hank Rhon, quien fue abordado por varios de los invitados para saludarlo, pues no es común verlo en este tipo de actos.

Además, Julián Leyzaola Pérez, quien por el anterior gobernador era perseguido para encarcelar y ahora hasta acudió como invitado especial.

La visita de Amlo en la región destacó por el apoyo que le sigue mostrando la gente en cada uno de los municipios.

Sin embargo, a nivel nacional lo que se hizo viral, fue el tremendo besote que le plantó a la diputada federal Julieta Ramírez, que quedó grabado en video y fue compartido a través de redes sociales.

Y aunque el video recibió muchas críticas, para los seguidores de Amlo se ve como un gran logro, al menos más de uno ya se dio cuenta después de esto que ella ya amarró la candidatura al Senado.

Claroscuros del segundo año de Marina

Aunque celebró por todo lo alto la culminación de su segundo año de gobierno, Marina del Pilar Ávila Olmeda aún tiene asuntos en los que ha quedado a deber a los bajacalifornianos.

Su llegada al gobierno generó gran expectativa, luego del de Jaime Bonilla quien se peleó con medio mundo e hizo de su minigobierno un caos donde hasta amenazó a empresarios.

Así que la llegada para Marina estaba prácticamente fácil, era ganancia, pues ya no era Bonilla, ya con eso llevaba las de ganar.

Pero aún así ha desaprovechado una gran oportunidad de poder hacer las cosas bien y de hacer un gran gobierno liderado por una joven mujer.

La seguridad tal parece que no ha logrado encabezar una verdadera estrategia. Tanto pugnó llegando a modificar las leyes para que fiscalía y secretaría quedaran separadas para que ni una ni otra destaquen por su trabajo.

Tan es así, que en ambas ya hizo cambios, pero ni los funcionarios que estaban ni los actuales han podido destacar con sus resultados.

Hizo todo a modo para que Ricardo Iván Carpio tuviera su puestazo, era incluso uno de los funcionarios consentidos, se notaba en las mañaneras, donde aunque no daba un resultado, ella no dejaba de darle sus sobaditas.

Al final, no le quedó de otra solo que pedirle su renuncia y así, Carpio salió por la puerta trasera, dejando una serie de habladurías sobre su salida.

En la secretaría puede lavarse las manos diciendo que le pusieron al general Gilberto Landeros, quien tuvo una gestión gris y salió incluso antes que Carpio.

Los actuales funcionarios Leopoldo Aguilar Durán, secretario de Seguridad y María Elena Andrade Ramírez no traen nada.

La señora dejó la víbora chillando en el sistema penitenciario y sin duda el cargo de fiscal le queda grande, al ser cuestionada sobre los casos, es evidente que su desconocimiento de los temas y una falta de datos.

Así que el principal pendiente de la gobernadora sigue siendo la seguridad, pero no es el único.

A Marina le hace falta acudir a las colonias y enterarse de primera mano de las verdaderas necesidades de la gente, su agenda está basada en eventos con organismos, pero le falta recorrer y escuchar a la gente en las calles.

Un gran problema que están viviendo los municipios, sobre todo en Tijuana, es el de la movilidad, la gente pasa buena parte de su tiempo en espera de transporte o trasladándose de un lugar a otro.

El tráfico denso disminuye la calidad de vida de las personas y aunque ya arrancaron algunas obras que se supone ayudarán a menguar éste, la realidad es que aún no se refleja el resultado, pues por el contrario, las obras están causando mayor espera.

La poca transparencia con la que maneja algunos temas es otro de sus puntos débiles, sobre todo con esa farsa llamada mañanera semanal, que es un teatro a modo.

Los avances

Pero no todo ha sido malo en el gobierno de Marina, al menos en estos dos años ha mostrado algunas cosas buenas.

Entre lo que ella misma destaca son las obras de infraestructura, que dice cuya inversión es mayor a lo que invirtieron los anteriores tres gobernadores.

Destacan sus obras insignias de los parques Esperanto en Tijuana y Laguna en Mexicali.

Y bueno, algo que ella menciona cada semana son los desayunos calientitos para niños en escuelas y los apoyos a las madres de familia.

Color de rosa

Tiene Marina una gran oportunidad de mostrar lo que es un estado gobernado por una mujer, pero aún así, ha elegido la parte rosa de ser mujer.

Si se le pregunta a la gente en la calle que sabe de la gobernadora, pues seguramente contestarán lo que ven en TikTok: la señora con sus hijos, disfrutando estar en el poder.

Tal parece que a Baja California lo gobierna una primera dama y no una mandataria.

Aún así habrá que darle el beneficio de la duda a Marina, aún quedan cuatro años, aún puede, si así lo quiere, hacer algo por BC.

 

 

 

 

 

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