Este martes, la  Audiencia de Barcelona ha decidido remitir a juicio al exfutbolista del FC Barcelona, Dani Alves, por un delito de agresión sexual. La acusación se centra en la presunta violación de una joven en el reservado de la discoteca Sutton en la ciudad catalana durante el pasado mes de diciembre.

La sección 21° de la Audiencia confirmó el procesamiento del exinternacional brasileño, basándose en las declaraciones de la víctima, los testimonios de los testigos y las pruebas periciales que respaldan suficientes indicios para llevarlo a juicio por agresión sexual.

La resolución abre un plazo de cinco días para que la Fiscalía y la acusación particular presenten sus escritos de calificación, el último trámite antes de fijar la fecha del juicio, que hasta el momento es desconocida.

Desde el inicio del caso, la denunciante ha sostenido que Alves la llevó al baño del reservado de la discoteca, donde intentó agredirla sexualmente. Ante el rechazo de la joven, el futbolista la habría golpeado y agredido de manera violenta.

En diversas declaraciones a lo largo de la investigación, el exjugador del FC Barcelona ofreció hasta cuatro versiones distintas de los eventos en el baño de la discoteca. Inicialmente negó conocer a la víctima, luego admitió coincidir con ella en el baño sin que sucediera nada, pero finalmente afirmó que la joven le practicó una felación de manera consensuada cuando confrontaron sus declaraciones con pruebas biológicas.

En abril, tras conocerse los resultados de las pruebas de ADN que confirmaron restos de semen de Alves en las partes íntimas de la víctima, el futbolista admitió por primera vez haber mantenido relaciones sexuales consensuadas con ella por vía vaginal. Alegó que inicialmente mintió para ocultar su infidelidad a su esposa.