Mientras en Nueva York las autoridades aprobaron una ley que prohíbe alquileres de estancia corta por la proliferación de hoteles ilegales y la falta de viviendas asequibles para las y los habitantes locales, en la Ciudad de México la cosa es totalmente diferente. 

Un servicio de estancia corta, como Airbnb, es una plataforma en línea que conecta a personas que buscan alojamiento temporal con personas que tienen propiedades para alquilar durante períodos breves, generalmente desde unas pocas noches hasta varias semanas. Airbnb es uno de los ejemplos más conocidos, pero existen servicios similares en todo el mundo.

Los anfitriones son quienes ofrecen sus propiedades para alquilar, ya sean propietarios de viviendas, inquilinos con permiso o propietarios de hoteles boutique. Crean perfiles en la plataforma, proporcionan detalles de sus propiedades y establecen tarifas, disponibilidad y reglas.

En lo que va del 2023, las viviendas completas para renta de estancia corta aumentaron al menos un 17.5%, de acuerdo con el sitio Inside Airbnb. 

Según un análisis realizado por Expansión Política, en enero la plataforma Airbnb ofrecía 14 mil 188 casas y departamentos para alquilar y ahora esa cifra se elevó a 16 mil 590. Las alcaldías con mayor número de estancias son Cuauhtémoc, Miguel Hidalgo y Benito Juárez.

 Estas cifras surgieron en medio de las promesas de las autoridades capitalinas para regular las plataformas de hospedaje ante los impactos de la gentrificación y los costos tan elevados de las viviendas en la CDMX.