La compañía que Sam Bankman-Fried fundó y desde la cual manejaba la criptomoneda FTX alcanzó un valor en el mercado de 30 mil millones de dólares, o 30 billones anglosajones. Durante este tiempo, Bankman-Fried retiró miles de millones de fondos de sus clientes para usarlos en sus negocios personales, lo cuál es considerado fraude al hacerse sin consentimiento.

Caída del valor de las criptomonedas y FTX

Como le ocurrió a todo el mercado de criptomonedas, la compañía fundada por Bankman-Fried perdió una gran parte de su valor en la primavera del 2022, cuando el valor de este mercado bajó de 3 trillones de dólares a sólo 1 trillón. Es importante tener en cuenta que es un trillón anglosajón, o un trillón en escala numérica corta el cuál equivale a un billón.

Durante esta época una multitud de clientes de este tipo de empresas hicieron lo posible por recuperar el dinero que habían invertido en criptomonedas. Para la empresa del empresario de 31 años esto provocó un efecto dominó.

Los usuarios no podían recuperar su dinero pues la compañía tenía un déficit económico. A la empresa FTX le hacían falta 8 billones de dólares que deberían estar disponibles. El 11 de noviembre de 2022, la compañía se declaró en bancarrota y Bankman renunció como CEO de la misma.

Gracias a un reporte del sitio de transacciones de criptomonedas Coindesk se descubrió que una segunda empresa fundada por el mismo Bankman, de nombre Alameda, estaba en gran medida financiada con los fondos de FTX.

Dadas las evidencias, se da por hecho que Bankman movió los fondos que pertenecían a sus clientes de FTX a Alameda, por lo que fue arrestado en las Bahamas bajo los cargos de fraude y conspiración y posteriormente lo extraditaron a los Estados Unidos.

Los cargos en el caso contra Sam Bankman-Fried

El empresario enfrenta siete cargos, la mayoría de ellos de fraude y en los que se incluyen fraude electrónico y fraude de seguridad, de los cuales se declaró inocente.

El caso se basa en las acusaciones de que Bankman tomó dinero de los clientes de FTX para cubrir las pérdidas de su segunda empresa. Parte de la demanda también incurre en el encubrimiento de las pérdidas que Alameda estaba sufriendo y en general de su esquema de negocios.

Según la defensa su principal argumento para el juicio será que como empresario inexperto Bankman no sabía que mover fondos de una empresa a otra como lo hizo era ilegal. 

Aún si lograran demostrar que Sam Bankman-Fried no sabía que lo que hacía era ilegal el empresario tendría sanciones importantes. En la mayoría de los casos no saber que algo es ilegal no exenta a la persona de recibir la sanción adecuada.

El juzgado para el juicio será elegido este martes 3 de octubre y se espera que el mismo se extienda hasta seis semanas.