"Le Manoir du Diable" (también conocida como "The Haunted Castle" o "El castillo encantado") es ampliamente reconocida como la primera película de terror en la historia del cine.

 Dirigida por el talentoso Georges Méliès, esta película francesa se estrenó en 1896 y tiene una duración de aproximadamente tres minutos. A pesar de su brevedad, dejó una marca indeleble en el mundo del cine gracias a sus efectos visuales y trucos cinematográficos pioneros para su época, que incluían la repentina aparición de demonios y brujas.

La trama de la película se centra en un mago que realiza experimentos en un castillo, lo que desencadena la aparición de diversas criaturas sobrenaturales. Aunque su tono puede parecer inocente y cómico desde la perspectiva de los estándares modernos, en su momento, esta obra de Méliès fue innovadora y sentó las bases para el desarrollo del género de terror en el cine.

"Le Manoir du Diable" no solo es históricamente relevante como la primera película de terror conocida, sino que también influyó en las futuras películas de terror, estableciendo tropos y elementos visuales comunes. Inspirada en la literatura gótica y el folclore de la época, la película se proyectó en todo el mundo, contribuyendo al crecimiento y popularidad emergente del cine en sus primeros años.

Georges Méliès, director y mago francés, dejó una huella indeleble en la historia del cine con su enfoque en lo sobrenatural y sus efectos especiales innovadores.