A través de un comunicado, la Patrulla Fronteriza, sector San Diego, dio a conocer un par de intervenciones de sus agentes con presuntos traficantes de personas que terminaron en disparos, situación de peligro para los agentes y para los mismos migrantes.

Según menciona la Agente Jefe de Patrulla del Sector de San Diego, Patricia McGurk-Daniel, ante el incremento en la seguridad, los llamados "polleros" se han visto en la necesidad de imponer miedo a los agentes, utilizando armas y disparando contra ellos.

"Nuestros agentes están impidiendo que los traficantes de personas lleven a cabo sus negocios ilícitos y ésta es su peligrosísima respuesta. Está insensible exhibición demuestra claramente que a los traficantes de personas no les importa la seguridad de los migrantes ni de las fuerzas de seguridad", indicó McGurk.

El primer suceso de este tipo se registró el pasado 18 de agosto, cuando las unidades fronterizas identificaron a un grupo en el área de  las montañas de Otay, un sujeto detonó su arma en repetidas ocasiones en contra de los uniformados.

El otro percance ocurrió el pasado 22 de agosto, cuando  personal de la Guardia Nacional de EE.UU. que operaba un radar móvil, detectó a un individuo armado escalando el muro fronterizo internacional, en la misma zona anterior. Dos días después se identificó a dos personas igualmente armadas en las cercanías del muro. Tras una inspección no pudieron dar con ellos.