“El aire es inaceptable. El calor es insoportable. Y el nivel de ganancia de los combustibles fósiles y la inacción climática es inaceptable”. 

Esas fueron las palabras con las que el secretario general de la ONU, António Guterres, anunció que la era del calentamiento global terminó para abrir paso a la era de la ebullición global debido a los efectos de la crisis climática.

Su advertencia surgió luego de que la Organización Meteorológica Mundial confirmara que julio fue el mes más caluroso desde que se tienen registros. 

Recordemos que, durante julio, se batieron varios récords de temperatura en algunas regiones y a nivel global. Por este motivo, Guterres urgió a tomar acciones climáticas inmediatas y drásticas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.

En Grecia, se enfrentaron incendios en la región de Dervenochoria, debido a el intenso calor que se presentó

En la isla italiana de Cerdeña, se presentó una temperatura máxima de 46 °C (114,8 °F) durante julio, persistiendo el calor extremo durante días en algunas partes de Italia.

España también ha enfrentado olas de calor consecutivas, con temperaturas que alcanzaron los 44 °C (111.2 °F) en el sur del país. Estas condiciones climáticas extremas están generando gran inquietud entre la población.