Las dietas veganas generan un 75% menos de emisiones, contaminación del agua y uso de la tierra que las dietas en las que se come más de 100 gramos de carne al día. Además, las dietas basadas en plantas y vegetales redujeron un 66% la destrucción de vida silvestre y un 54% el uso de agua. 

Esas fueron las principales conclusiones de un nuevo estudio publicado en Nature Food. Las y los investigadores analizaron las dietas reales de 55 mil personas en Reino Unido y otros datos de 38 mil granjas.

¿Por qué importa?

Porque el sistema alimentario tiene un impacto muy grande en nuestro planeta. Según datos, este sector emite un tercio de las emisiones totales de gases de efecto invernadero que provocan el calentamiento global. Además, investigadores de la Universidad de Oxford calcularon que el 83% de las tierras de cultivo globales son ocupadas para la producción de alimentos de origen animal.

Reducir el consumo de carne es positivo para el medio ambiente y la salud personal. Sugerencias para lograrlo: incorporar más opciones vegetales en la dieta, probar recetas vegetarianas/veganas, unirse al movimiento "Lunes sin carne", disminuir gradualmente la carne roja/procesada, elegir pescado y aves más sostenibles si no se quiere eliminar por completo la carne, investigar sobre agricultura sostenible, ser consciente de los beneficios ambientales, planificar comidas basadas en plantas, intercambiar recetas y consejos con otros. 

La transición no tiene que ser abrupta; pequeños cambios hacen una diferencia para el planeta y el bienestar.