Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno de la Ciudad de México, anunció oficialmente su separación definitiva del cargo a partir del 16 de junio de 2023. La razón detrás de esta decisión es su intención de buscar la candidatura presidencial por el partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena), con el propósito de dar continuidad al proyecto político iniciado por el actual presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO).

En un mensaje breve, Sheinbaum estuvo acompañada por su gabinete ampliado mientras comunicaba su determinación. La mandataria destacó su aspiración de convertirse en la primera mujer en la historia de México en liderar los destinos de la nación y expresó su deseo de llevar a cabo la obra de transformación impulsada por López Obrador, pero con su propio sello característico.

Inicialmente, Sheinbaum no había considerado necesario que los aspirantes a la candidatura presidencial de Morena abandonaran sus cargos, sin embargo, el Consejo Nacional del partido tomó una resolución distinta. Por lo tanto, la jefa de Gobierno acató el acuerdo alcanzado por la militancia el domingo pasado, en el que se estableció que los interesados en competir por la candidatura deberían separarse de sus puestos actuales.

"El Consejo Nacional de Morena tomó la decisión acertada. Por encima de todo está el movimiento, y respetaré todos los acuerdos que se aprobaron ayer", declaró Sheinbaum, mostrando su respeto hacia la determinación tomada por el partido.

La salida de Claudia Sheinbaum del cargo como jefa de Gobierno de la Ciudad de México abre el camino para una nueva etapa en la política de la capital, mientras se anticipa una intensa contienda interna dentro de Morena para definir quién será el candidato o candidata que representará al partido en las elecciones presidenciales. Además, se suma a este panorama la renuncia formal de Marcelo Ebrard a su cargo como titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores, lo que genera aún más especulaciones y expectativas en el ámbito político mexicano.

Con la separación de Sheinbaum y la renuncia de Ebrard, se reconfiguran las piezas en el tablero político de México, y se abre paso a una nueva etapa llena de incertidumbre y competencia en el ámbito electoral.