Lo sería un día especial para los ciclistas de la región, se convirtió en un altercado entre la policía y los deportistas, quienes vieron interrumpido el arranque del tradicional Paseo Ciclistas Rosario-Ensenada cuando una patrulla de la Policía Municipal de Playas de Rosarito se atravesó a media calle para impedir que salieran los participantes.

Cómo quedó registrado en varios vídeos, oficiales de la Secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) de Rosarito comandada por Javier Arellano, cortaron el acceso de las vallas de seguridad y dieron paso a la unidad, pues de acuerdo con un comunicado del Ayuntamiento, los organizadores de la carrera no pagaron los permisos necesarios.

Sin embargo, pese al intento de impedir la carrera por parte de la administración de la alcaldesa Aracely Brown, quien está en la Ciudad de México, los más de 4 mil participantes continuaron con el paseo, pero sin protección de parte de la Policía Municipal, que abrió la circulación a los vehículos sobre la autopista de cuota a Ensenada.

El intento de sabotaje por parte de las autoridades municipales de Rosarito, se dio al momento de la salida de la categoría profesional y semiprofesional, justo enfrente del hotel Rosarito, sobre el bulevar Benito Juárez.

El equipo de Los Cucú’s antes de iniciar el Paseo Ciclista Rosarito - Ensenada

La directora de Operaciones, Ana Castro, dio a conocer su versión de los hechos registrados en la ciclovía de Rosarito, donde mencionó que las autoridades en un momento apoyaron la reducción del tráfico.

Sin embargo, las autoridades llegaron a querer suspender el evento por falta de trámites, indicando que llevan más de tres meses hablando con Cotuco, siendo el comité el intermediario de todos los eventos.

Sostiene que pidió un cobro muy alto, también afirma que las unidades policiales llegaron antes de la salida para cerrar el paso a los ciclistas e incluso un agente golpeó a varios de ellos.

“Un oficial que estaba ahí obligó a los vehículos ciudadanos a meterse entre los ciclistas, los ciudadanos no querían entrar porque estaban respetando a los ciclistas en la calle y el oficial los obligó”, dijo Ana Castro.

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